Investigaciones apuntan a que esta planta adquiere cada día más adeptos por sus usos.
Diversas investigaciones científicas se desarrollan con éxito en distintas universidades y centros de investigación nacional, orientados a conocer los componentes químicos, propiedades farmacológicas y aplicaciones en el área farmacéutica y cosmética de las hojas de murta.
La murta (también conocida como murtilla), cuyo nombre científico es Ugni molinae Turcz, es un arbusto conocido desde antes de la época colonial y se encuentra de manera silvestre entre las VII y X regiones de nuestro país.
"Su pequeño fruto parecido a un arándano, de color rojizo y muy aromático, se consume como fruta fresca, agregado en postres y licores. Las hojas de esta especie se emplean tradicionalmente para tratar el cutis reseco y aumentar la elasticidad de la piel. En la actualidad, el cultivo y producción de manera industrial de esta especie nativa incursiona en mercados internacionales", comenta la doctora María Cristina Aguirre, docente de Botánica y Farmacognosia de la Escuela de Química y Farmacia de la U. Andrés Bello.
ESTUDIOS
La químico farmacéutico ha trabajado durante cinco años en el estudio químico y farmacológico de las hojas de esta planta.
"Las propiedades antiinflamatorias tópicas, analgésicas tópicas, antioxidantes y cicatrizantes, sumado a una composición química similar a la Centella asiática, abre numerosas posibilidades de aplicaciones para la industria de productos naturales, cosmética y farmacéutica", analiza.
"En estudios químicos y farmacológicos de las hojas de esta especie, hemos demostrado la presencia de triterpenos de estructura pentacíclica con una significativa actividad analgésica y antiinflamatoria tópica; y flavonoides y taninos con actividad antioxidante. Además, extractos preparados con las hojas de Ugni molinae conteniendo triterpenos y flavonoides, han presentado una significativa actividad cicatrizante. Esta última actividad se debería a la presencia de un componente denominado ácido asiático, conocido como uno de los componentes activos del extracto estandarizado de Centella asiática, y para el cual se han descrito las propiedades reguladoras de la síntesis de colágeno involucrado en la cicatrización de heridas e inhibidor de la fase inflamatoria de las cicatrices y queloides hipertróficas", explica la docente de la U. Andrés Bello.
Estos antecedentes orientan el uso de esta planta como un ingrediente activo en formulaciones dermatológicas sin limitar la explotación comercial de los frutos, otorgándole así un mayor valor agregado a los cultivos de esta especie nativa. Esto adquiere mayor relevancia dada la creciente demanda de productos naturales y considerando que Chile tiene lugar para cultivar.
Fuente: El Llanquihue